Según los datos arrojados por un estudio que realizó el Centro de Seguridad para menores en Internet Protegelos.com, en colaboración con otros países europeos, España se sitúa a la cabeza como el país con la tasa más alta de menores en riesgo de sufrir adicción a internet, un 21,3%, una cifra que duplica la media europea, situada en 13%.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que una de cada cuatro personas sufre trastornos de conducta vinculados con las nuevas tecnologías. En España, se calcula que entre un 6 y un 9 por ciento de los usuarios habituales de Internet podría haber desarrollado algún comportamiento adictivo.
EN todo caso, es importante saber qué es lo que se practica en internet, pues es una red que podemos dedicar a múltiples actividades. A partir de aquí, se plantearía una duda; ¿la adicción es a internet o la actividad que realizamos? Por ejemplo, alguien que utiliza la red para consumir pornografía, ¿presenta una adicción a la pornografía o a internet? Yo pondría en primer lugar la segunda, y el uso de la red en segundo orden de importancia. Es fundamental tener en cuenta que a través de internet podemos acceder con un solo click, económicamente, clandestinamente, y desde donde estemos a prácticamente todo lo que estemos buscando.
He aglutinado los siguientes rasgos que caracterizan la adicción o dependencia a internet ya que no existe un consenso generalizado:
- Ausencia de control respecto a la adicción
- Dedicación de tiempo a Internet cada vez más elevada.
- Sentimiento de euforia cuando está conectado.
- Ansiedad por pasar más tiempo en Internet; desasosiego/inquietud cuando no está conectado.
- Desatención de familiares y amigos.
- Miente sobre el tiempo que dedica a la red.
- El uso de Internet interfiere con otras actividades (trabajo, estudio, relaciones sociales, etc.).
Sentimiento de culpa o vergüenza por la cantidad de tiempo que pasa en la red. - Alteración del sueño.
- Cambios en el peso, dolores de la columna, dolores de cabeza, síndrome del túnel carpiano.
- Alejamiento de otras actividades.
Según Echeburúa, hay ciertas características de personalidad o estados emocionales que aumentan la vulnerabilidad psicológica a las adicciones, son estas:
- Características de personalidad:introversión acusada, baja autoestima y nivel alto de búsqueda de sensaciones.
- Características de las relaciones interpersonales: timidez, conflictos a nivel social y fobia social.
- En el plano cognitivo:fantasía descontrolada, atención dispersa y tendencia a la distracción.
- Otras patologías:Adicciones químicas o psicológicas presentes o pasadas. Depresión, ansiedad y otros trastornos.
Diversos autores han encontrado que lo que existe es un trastorno psicológico o carencia que se expresa a través de Internet. En mi experiencia clínica confirmo este dato, además de que lo relaciono mucho con soledad y depresión. La mayoría de las veces la adicción a Internet no es sino un trastorno secundario a otros como la fobia social, depresión, adicción al sexo u otros; en mi opinión son estos trastornos los que merecen una atención prioritaria.
Por lo tanto una buena evaluación es fundamental, pues nos encontramos con una adicción multifactorial, debemos conocer las características del individuo, a nivel personal, social, laboral, afectivo, físico, y entender su historia de vida, para ir encontrando las claves de esta dependencia. Si lo entendemos en profundidad, podremos saber para qué ha desarrollado una adicción a internet y cómo resolverla.
Psicólogo Collado Villalba – Psicólogo Madrid, avenida de América, Barrio Salamanca