El DSM-V (manual diagnóstico en psicología y psiquiatría) propone la adicción al sexo o hipersexualidad como una nueva patología, que comprende los siguientes síntomas.
Ellos proponen
Durante un período de al menos seis meses, presenta fantasías sexuales recurrentes e intensas, impulsos sexuales y conducta sexual en asociación con cuatro o más de los siguientes criterios:
- Consume excesivo tiempo en fantasías e impulsos sexuales, planificando y participando en conductas sexuales
- Repetidamente desarrolla esas fantasías, impulsos y conductas sexuales como respuesta a eventos estresantes de la vida fantasías, impulsos y conductas sexuales
- Repite el comportamiento sexual sin tener en cuenta el riesgo de daño físico o emocional a sí mismo o a otros.
- Existe un malestar clínicamente significativo o deterioro personal en las áreas social, profesional o de otro tipo de funcionamiento, asociado con la frecuencia e intensidad de estas fantasías, impulsos y conductas sexuales.
- Estas fantasías sexuales, impulsos y conductas no se deben a los efectos fisiológicos directos de sustancias exógenas o a episodios maniacos.
- La persona tiene al menos 18 años.
- Es necesario especificar si las conductas son de masturbación, consumo de pornografía, relaciones sexuales consentidas con adultos, prácticas sexuales a través de internet (cibersexo), llamadas teléfonicas con contenido sexual etc.
Se trata de un trastorno de carácter obsesivo compulsivo, por el cual los afectados son absolutamente incapaces de controlar voluntariamente sus pensamientos y en ocasiones su comportamiento.
Es evidente que el deseo sexual no es estándar, varía considerablemente en las personas, lo que alguien podría considerar como excesivo, para otra podría ser escaso.
No estamos hablando de personas que tengan una vida sexual muy activa, en la hipersexualidad hablamos de personas no tienen sensación de control, no llegan nunca a satisfacerse.
Se sienten incómodos con este problema y presentan afectación negativa en otras áreas como la social, la afectiva, la laboral y en la salud
Estadísticas
La incidencia no es insignificante, se manejan cifras en torno al 6% de la población, con lo que en España hablaríamos de cerca de 3 millones de personas
Puede aparecer en episodios maniacos en el caso del trastorno bipolar, en abuso de sustancias y también asociado a algunos trastornos de personalidad.
Para mí es un tipo de adicción más, como ocurre con las drogas, con la comida y con otro tipo de conductas.
Encontré una investigación que detectó que existen tres áreas del cerebro, el estrato ventral, el córtex del cíngulo anterior y la amígdala, que se ven activadas en personas con hipersexualidad cuando se les muestran imágenes con contenido sexual.
Son exactamente estas áreas las que muestran mayor nivel de actividad en el caso de personas drogodependientes que se ven expuestos a la sustancia psicotrópica de la que abusan.
Por lo tanto, mi afrontamiento de la adicción al sexo es similar a la de cualquier otra sustancia, drogas, alimentación, juego, y otras conductas.
Parte del estudio de la historia de vida del individuo que acude a terapia, sus necesidades, sus miedos, sus asuntos no resueltos, y la función que cumple esta adicción en su vida.
Por supuesto, considerando las consecuencias que cada adicción tiene sobre la persona, pues a veces, ponemos en riesgo nuestra vida, o la de otros.
En el caso de la hipersexualidad, es especialmente peligrosa la exposición a ITS (infecciones de transmisión sexual) que pueden causar incluso la muerte del afectado o de su pareja o familiares, o si hablamos de transgresiones más graves donde existen conductas sexuales sin consentimiento, pero esto nos lleva a otros derroteros…
Psicólogo Collado Villalba Psicólogo Madrid Barrio Salamanca Avenida de América.